martes, 19 de junio de 2012

Hace calor, no puedo dormir y tengo un montón de libros por leer

Justo hoy me decía mi novio que últimamente le costaba dormir y ahora voy yo y también me proclamo en huelga de sueño... ¡pues vamos apañados!

En esta época del año en la que estamos es muy normal que uno ya no pueda dormir, entre el calor y el agobio general no hay quien pegue ojo. 

Normalmente mis problemas de insomnio los soluciono cogiendo un libro y pasando páginas, o me duermo o me engancho al libro y me quedó hasta que son las 5. No os alarméis, me suelo dormir. Bueno, pues que en estas que me he decidido en leer algo y he echado un ligero vistazo a la estantería y me he dado cuenta de la ingente cantidad de lectura que tengo pendiente... ahí va mi torre particular:


De arriba a abajo, de izquierda a derecha tenemos:

-Cementerio de animales, de Stephen King (para dormir menos aún, ya puestos...)
-The Tales of Beeder the Bard, de J.K. Rowling. (¡Me encanta la edición, en inglés además! Mi hermana, que es un cielo, me lo trajo de Inglaterra cuando salió. Lo leí en su día pero me gustaría volverlo a leer.)
-Crónicas de la Torre 3 y "4", de Laura Gallego García. (Los dos primeros me los leí en dos noches de insomnio, a la tercera noche ya tenía sueño. Como son tan cortos creo que leeré los 4 del tirón en la playa, es un buen plan.)
-Crónicas de la Dragonlace, de Margaret Weis y Tracy Hickman. (De mi cumpleaños, voy con el primero a buen ritmo.)
-David Copperfield, de Charles Dickens. (¡Ja! ¡Mi propósito del año! Voy por la mitad y me está gustando mucho, lo que pasa que lo tengo en plan reserva, lo leo muy de vez en cuando. A ver si me pongo en serio.)
-El hipnotista, de Lars Kepler. (El problema de tener una tía y una prima devora libros es que te pasen sus libros, cosa que provoca que tengamos la casa que parece la Casa del Libro y el Fnac juntas.)
-Musashi, de Eiji Yoshikawa. (Lo he empezado pero quiero leerlo bien, últimamente me ha dado por empezar muchos libros y no avanzar en ninguno. Muy mal hecho.)
-El rey de la ciudad púrpura, de Rebecca Gablé. (Huy, este ya es un clásico, lleva por lo menos dos años en la estantería. Me devoré El segundo reino y El traductor del rey y aún no sé por qué no he empezado este. Porque pasa desapercibido quizá)
-La Torre Oscura 4,5,6,7, de Stephen King. (Nada, el día que los pille los ventilo.)
-Historia de dos ciudades, de Charles Dickens. (El otro propósito del año. Otro que se va a ir a la playa de veraneo.)
-La casa de Riverton, de Kate Morton. (Ahí está para cuando lo pueda leer.)

Y eso es lo pendiente que tengo por aquí por leer (si cruzo la frontera de mi feudo, es decir, mi habitación ya me veo perdida). En papel. Si abro mi biblioteca de Calibre (de la que sólo hay libros potenciales según mis gustos) ya sí que no acabamos. Y en el ebook tengo algún que otro libro a medio leer.

Esto es un caos, nunca he tenido más de 3 libros estables leyéndome a la vez (bueno, he tenido épocas de 5). No te inmersas en ningún en concreto y al final tienes 8 libros parcialmente leídos de los cuales algunos ya ni te acuerdas de los secundarios. Conclusión, voy a cortar por lo sano. Voy a leerme dos libros a la vez (por si me canso del género, o me despierto con ganas de otra cosa) y a ver si espabilo.

Los elegidos son (porque son los dos que tengo más avanzados): El Retorno de los Dragones y David Cooperfield. 

Otro dilema que tengo es qué hacer con el ebook estas vacaciones de agosto... Durante el verano me suelo ventilar unos 8/9 libros, así que la opción ebook parece muy atractiva por su practicidad en ocupar poco, pesar menos aún y poder llevar muchos libros. Bueno, pues la temática veraniega de este año va a ser playa, y es ahí donde no me gusta la idea del ebook. Arena, agua, crema de sol, arena, arena, calentamiento preocupante del cacharro, fragilidad, ¿robo?, torpeza. Eso resume lo que me dice el cerebro al juntar las variables: ebook + playa. Vamos, que me veo yendo de vacaciones con la maleta más una mochila llena de libros xDD  Lo prefiero a que se me estropee el juguetito más estupendo del año (bueno, tiene un año y un mes, aunque lo uso tanto que parece que lo tenga desde hace más tiempo.)

Así que visto el panorama, voy a leer un par de capítulos de la Dragonlance a ver si me duermo.


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